Los niños y los adolescentes pueden sufrir traumas con más facilidad que los adultos.. Son muy sensibles sobre todo a lo relacionado con las perdidas de vinculación y apego, como son muertes de personas cercanas, hospitalizaciones de ellos o personas queridas, divorcios, etc…
El EMDR se puede usar con población infantil y adolescente, adaptándolo desarrollo evolutivo de cada niño y sus propias características.
Las sesiones de EMDR con niños y adolescentes pueden ser un poco diferentes a las de los adultos, especialmente si les cuesta identificar lo que les está pasando. En estos casos, para ayudarles a identificar las situaciones traumáticas se usan técnicas proyectivas como muñecos, dibujos, cuentos, cartas.o dados.
El EMDR para niños y adolescentes les ayuda a: